Chusquero

© Justo Fernández López www.hispanoteca.eu

ARCHIVO DE CONSULTAS

«Vale, Chávez será un chusquero de los que si naces para golpista del cielo
te caen los tanques, pero la oposición tampoco es un angelito»
(Viñeta de Romeu en El País, 16.01.2003)
¿Qué significa aquí chusquero?

La palabra chusco, como adjetivo, significa en alemán ’drollig’. Como sustantivo, es un mendrugo de pan (’trockes Stück Brot’) o el pan que se cuece en los cuarteles para los soldados: alargado, pero más pequeño que una barra normal de pan. Suele ser muy duro y compacto, no muy fácil de digerir. Según María Moliner: «chusco: quizá por ser reseco, de un sup. “chuscarro“, de “chuscarrar“ (chamuscar).»

De modo que el que comió mucho chusco en los cuarteles como soldado y, después de cumplir el servicio militar, se “reengancha“ y lo sigue comiendo varios años hasta ascender en la escala militar, es un chusquero.

La palabra chusco aparece en todos los diccionarios monolingües, no así chusquero. En los bilingües aparece en el de Slaby-Grossman, pero traducido como Berufssoldat, cosa que no se corresponde exactamente con la realidad.  Según el DRAE: «Chusquero: Dicho de un suboficial o de un oficial del Ejército: Que ha ascendido desde soldado raso.» y el Diccionario didáctico de español – Intemedio recoge la definición de la Real Academia, añadiendo un ejemplo que matiza más el sentido: «Chusquero: Referido a un oficial o a un suboficial del ejército, que ha ascendido desde soldado raso: Es un chusquero, porque cuando hizo el servicio miliar se reenganchó.» No es, pues, un militar profesional en el sentido estricto de la palabra, como sugiere el diccionario de Slaby-Großmann, pues Berufssoldat no tiene un sentido negativo o despectivo en alemán, mientras que „un (oficial/suboficial) chusquero“ sí lo tiene, como se puede ver en la viñeta de Romeu a la que te refieres. La palabra clave es “reenganchado“ [(Mil) “reengancharse“ > ’sich weiter verpflichten’], que quiere decir que hizo el servicio militar obligatorio y después se quedó en el cuartel, porque era el único sitio donde le daban “el pan nuestro de cada día“, chusco, que fuera del cuartel tendría que ganar con el sudor de su frente. Tiene un sentido despectivo: un militar que no ha ascendido por méritos, sino por la inercia o por los años que lleva en el cuartel “reenganchado“, es decir, fue ascendiendo con los años. Tiene un sentido negativo: ser un aprovechado, conseguir algo no por méritos propios, etc.

chusco

  1. adj. Que tiene gracia: lo que has dicho es muy chusco

  2. m. Pedazo de pan duro [= mendrugo de pan]: daba al perro los chuscos que le sobraban

  3. Pieza de pan de forma alargada, más corta que la barra: se hizo un bocadillo con un chusco
    [Vox – Diccionario ... Universidad de Alcalá de Henares]

chusco

1. adj. Que tiene gracia, donaire y picardía. U. t. c. s.

2. adj. Perú. Dicho de un animal: cruzado (de castas distintas).

3. adj. Perú. Dicho de una persona: De modales toscos. U. t. c. s.

4. m. Pedazo de pan, mendrugo o panecillo.

5. m. Pan de munición. [DRAE]

chusco

  1. drollig, spaßhaft, pfiffig

  2. Spaßvogel

  3. Stück Brot, Brot, Brötchen, Semmel, [Mil] Kommißbrot [Fuente: Slaby-Grossmann]
    [es más grande y más alargado que un Semmel, pero no tanto como una barra (pan de barra). Según M. Moliner: «chusco: quizá por ser reseco, de un sup. “chuscarro“, de “chuscarrar“ (chamuscar).»]

chusquero

1. adj. coloq. Dicho de un suboficial o de un oficial del Ejército: Que ha ascendido desde soldado raso. U. t. c. s. [DRAE]

chusquero

  1. [Mil] Berufssoldat, [fam] Kommißkopf [Fuente: Slaby-Grossmann]

chusquero

Referido a un oficial o a un suboficial del ejército, que ha ascendido desde soldado raso: Es un chusquero, porque cuando hizo el servicio miliar se reenganchó.

[Diccionario didáctico de español – Intemedio, Madrid: Ediciones SM, 1993]

chusquero en textos y contextos

«El desorden de la oficina de intendencia de la Batería era un puro fiasco que había llevado al Capitán a tener un "apretón de sus superiores" que querían que aquello en seis meses estuviera al orden y para una inspección en profundidad; con esa excusa de la premura le pedí al Capitán que me dejara instalarme en el almacenillo anexo a la oficina pues de ese podría dedicarme alguna hora más a los papeles. Le pareció de maravillas al oficial y a mí me sacaba de agujero en el que dormíamos bajo tierra. Mis desvelos eran tantos, más debidos a las triquiñuelas que al trabajo laborioso, que al final era para alguien de mi formación y experiencia cosa de coser y cantar y en un par de meses estaba todo hecho, pero ese trabajo tenía que durar al menos los 8 meses que aún me restaban de vida militar. Como decía mis superiores, unos chusqueros que no sabían ni apenas contar, les tenía encandilados pues veían la luz de la oficina encendida hasta altas horas de la noche, y aunque yo dormía placidamente en el camastro, a ellos desde la ventana de sus dulces hogares debía parecerles mi trabajo una empresa ciclópea, y atendiendo a tan interesada aplicación, me enviaron un buen día a mi paisana una rubicona de tez morena rayando los cincuenta, con un café y unas tortas.»

«José María tenía día de “charletas”, es decir de visitas y despachos inútiles. Por ejemplo, a las 10.00 de la mañana había recibido a Makiko Tanaka, que, aunque no lo crean, es la ministra de Exteriores del Japón. Doña Makiko quería darse un garbeo por España y, de paso, conocer al presidente de turno de la Unión, supongo que para saber cuántos transistores podrán vender en la vieja Europa durante el semestre de Presidencia española de la Unión Europea. A las 11 horas recibe a George Robertson, el secretario general de la OTAN, un tipo con aspecto de sargento chusquero

«La conversación con el amigo George (últimamente, en este mundo nuestro el nombre de moda es George), fue de las que se califican de cordiales y francas. A lo largo de una hora, José María intentó convencer al sargento chusquero de la necesidad de ampliar el paraguas defensivo de la OTAN a Ceuta y Melilla. Es decir, que las tropas americanas nos defiendan de Mohamed[i][i]. En este capítulo se manifestaron dos puntos de vista muy nítidos: José María decía que sí y George que no.»

«El guardia civil chusquero le comenta a su compañero novato: ...»

«El Curriculum Vitae del Director de la Escuela (o su Asesor) podría ser el siguiente: Debiera ser un Capitán de los que los civiles llaman "Chusquero", del ejército español, heredero y depositario de una gloriosa tradición militar, especialista en lucha de guerrillas y contraguerrillas.»

«Mucho más podría decirse sobre lo importante que es pedagógicamente el alquilar o contratar a un miliciano chusquero, que con su racional instrucción y el desenvolvimiento de sus facultades, trate de alcanzar como finalidad suprema el tipo ideal de instructor y educador, no sólo en el aspecto puramente parapolicial, sino en el militar.»

«Cuando me refiero a los tises, me estoy refiriendo a títulos sin especialidad. No me refiero a los ayudantes de cupo, tema que ignoro, si bien seguí los comentarios del foro sobre el tema, básicamente aún no lo tengo claro, y sigo recabando información sobre la historia de los Ayudantes, espero estar bien informado sobre el tema alrededor del fin de semana próximo.  Perdona si me has interpretado mal, problamente fue culpa mia que no supe expresarme. Para mí los tises son aquellos que no han pasado por un hospital o bien les han firmado unas horas, un profe o bien un jefe chusquero. No te quepa duda de que a esos los llevaré a los tribunales, solo o acompañado.»

«De chusco viene chusquero, aplicado a los militares que han obtenido la graduación por la vía del escalafón, sin haber pasado por ninguna academia. Se tenían que ganar el chusco y se reengancharon tras la mili. Y aquí no sé si añadir, miedo me da, que el calificativo de chusquero tiene una cierta connotación despectiva.» [Foro apuntes 1999]

«Por estos pagos, chusco de pan, pero cada vez menos utilizado. Chusquero sí es despectivo, por lo menos en Ferrol (referente a militares). También tiene otro sentido, de mal hecho, poco convinvente, chapurezo, aunque no despectivo ni hiriente. "Ese dibujo es muy chusquero", "Lo hizo de una manera un tanto chusca (o chusquera)“.» [Foro apuntes 1999]

«-¿De qué vivía Charlie? -No tengo la menor idea. Yo no creo haberle visto nunca ir a trabajar. Por eso, a poco de comprar ellos la casa de al lado, pense que seria un chusquero o un policia jubilado. Esos se puedon jubilar relativemente pronto y con la casi totalidad de su sueldo. Muy pronto cambie de idea. Tenía demasiada arrogancia y manejaba demasiado dinero para haber sido simplemente un chusquero

«A la edad de 20 años y tras superar con éxito una operación de fimosis, Denton ingresa en el Ejercito Malayo, alcanzando en tan solo cuatro años, el empleo de Cabo Chusquero. Esta meteórica carrera castrense le hace recapacitar sobre el lugar donde se había dejado olvidado el peine, lo cual consigue recordar inútilmente, ya que cuando va a por el ya se lo habían llevado. Tras la muerte en combate de su anciano padre, Denton hereda una sustanciosa fortuna, por lo que decide abandonar la vida militar a pesar de que por entonces ya estaba a punto de ser ascendido a Cabo Chusquero de segunda.»

«¡Vivir con ella .... es estar recordando diariamente al "sargento chusquero" que te tocó en la mili. Tendrás que fichar para salir y para entrar en casa, y ojo con pasarte porque te fulmina!»

«En el ejército profesional serás lo que ellos quieran. La única diferenciación con el personal de reemplazo será en el régimen disciplinario (el nuestro es más severo). Vivirá junto a ellos, comerá lo mismo que ellos (y en muchos cuarteles juntos), dormirá en las mismas condiciones que ellos (y en muchos casos en la misma camareta) y cuando a uno de reemplazo le hagan cabo al mes de entrar te llamará chusquero de mierda y te echará en cara que él llegó a cabo en un mes y tú no lo has logrado en más de dos años, ¡ah! y encima debes obedecerle.»

«Jean Gabin (1904-1976). De aspecto rudo es capaz de transmitir realismo y sensibilidad a sus interpretaciones. En El muelle de las brumas, enamorado de la joven refugiada en casa de Panamá, encarna a un 'chusquero' hambriento, integro, inmerso en un paisaje de niebla, rodeado de personajes entrañables y otros malvados.»

«Nombre: Sí (poseo uno). Edad: 30 (nada menos)(a día 12-11-02). Residencia: Madrix. Estado civil: enganchao y a punto de vivir en pecao. Ocupación: Ingeniero chusquero.
Comentarios: Me gustan las mujeres y me gusta el vino y si tengo que olvidarlas bebo y olvido.»

«El ejército español anda todo atribulado al haberse constatado que la tierna juventud, aunque un sueldo le ofreció, dice que te sirvas tú que lo haces mucho mejor.
¡Manda huevos! dijo Trillo cuando el Estado Mayor le refirió el deshonor de esa panda de chiquillos y al momento le ordenó, tras disolver dos brigadas y tres cuarteles enteros, que medidas se adoptaran contra tan gran desafuero. El encargo recayó en un sargento chusquero del tercio de la Legión que enseguida caviló un remedio muy certero. Pensó que para atraer a tanta chiquillería nada mejor le vendría         que pasar la mercancía de su primo Mohamed y en la recluta ofrecer, además de la soldada, el filete y la ensalada, las copas en la cantina, papelillos Bolleré y un pedacito de china.»

«La verdad es que, de manera general, la mayoría de jefes, en especial los que son el equivalente a un sargento chusquero en la mili, valoran de manera muy positiva a pelotas y enteraos. Hay más de un gerente de empresa, sin conocimientos técnicos y bastante desorganizado, a quien es fácil impresionar con lo que sale por la boca de estos hijos de la fauna urbana. Lo que parece que no saben los jefecillos es que, pelotas y enteraos, son muy amigos de ocultar los conocimientos que poseen sobre el trabajo que desempeñan (no vaya a ser que les quiten el puesto). Sí, en realidad, la empresa les importa una mierda, simplemente, hacen ver que trabajan, prefieren decir a los nuevos que hagan lo que ellos no tienen ganas de hacer, aunque no con estas palabras (no hay que olvidarse que a estos elementos les gusta mandar).»

«Otros decidieron buscarse un método más ingenioso y sencillo (y menos peligroso para la salud). Afirmar que se era sonámbulo. El método no podía ser más simple: todas las noches un paseito, y a la cama. Intentar montar ruido, ponerse en situaciones peligrosas y ale, a casa con la blanca. Eso sí, había que sortear las malas pulgas del chusquero de turno que, avisado, podía jugarle la mala pasada de probar a despertarlo como hacen estos señores todo: a hostias, y eso tampoco es.»

«Me alegro de que al final sea multiplataforma. (aunque también oí algo de la gamecube). Pues eso, espero que no sea un port a diestro y siniestro porque dada la diferencia de programación de la dos consolas puede salir muy chusquero. Esperemos que lo hayan hecho prácticamente de 0. Ya me diréis los boxers qué tal está.»

«No, no, no... No es posible que Palha sea tan malo como ganadero. No puede ser. Alguna razón oculta debe encerrar el misterio de la malísima condición de sus toros: un virus, una bacteria, un resfriado mal curado o quién sabe si un toro forastero, jovenzuelo y buen mozo, pero chusquero al fin y al cabo, que se saltó la valla una noche de luna, y se benefició a todas las vacas en edad de merecer.» [Antonio Lorca, en El País]