El qué - lo qué

© Justo Fernández López www.hispanoteca.eu

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Quisiera saber si es correcta la pregunta «¿lo qué?» en el siguiente contexto:

-¿Has llevado el libro?

-¿Lo qué?

-¿Si has llevado el libro?

-No, no lo he llevado.

 ¿O es un loísmo? ¿En qué casos sería la pregunta «¿lo qué?» correcta?

Yo diría:

-¿Has llevado el libro?

-¿El qué?

-¿Si has llevado el libro?

-No, no lo he llevado.

Pero «¿lo qué?» tampoco me suena muy mal.

El pronombre interrogativo qué puede constituir por sí solo un enunciado: 

-¿Sabes qué me gustaría a mí ahora?

-¿Qué?

En el habla coloquial es frecuente en estos casos anteponer al interrogativo qué el artículo masculino el:

-¿Cómo funciona esto?

-¿El qué?

Según el Diccionario panhispánico de dudas de la RAE, no es admisible en la lengua culta anteponer al pronombre interrogativo el artículo neutro lo:

-¿Cómo funciona esto?

-¿Lo qué?

La pregunta ¿lo qué? es un regionalismo.

La pregunta ¿el qué? es una expresión que pertenece a la lengua coloquial general.

En la lengua culta se emplea en estos casos el simple interrogativo ¿qué?

Lo suele considerarse como artículo neutro por su capacidad de sustantivar adjetivos y determinadas oraciones de relativo: lo malo, lo que está mal. Para muchos lingüistas se trata, en cambio, de un pronombre.

El hecho de que en el habla coloquial se emplee ¿el qué? para cerciorarse de lo que ha dicho el interlocutor puede deberse a que el hablante percibe que si pregunta usando solamente el interrogativo ¿qué? el interlocutor creerá que no ha entendido toda la pregunta:

-¿Has traído el libro?

-¿Qué? [= ¿qué dices?]

-Que si has traído el libro.

Si el interlocutor ha entendido la pregunta, pero no ha atendido bien a qué objeto se refiere el interlocutor, intenta focalizar solamente el objeto directo: 

 -¿Has traído el libro?

-¿El qué? [= ¿qué tenía que haber traído?]

-El libro.

En este caso, el interlocutor no necesita repetir toda la pregunta.

De todos modos, lo qué no es admisible en la lengua culta. En lo qué parece como si el hablante percibiera lo como pronombre neutro. Como artículo lo sólo se antepone a adjetivos sustantivados o a determinadas oraciones de relativo.

Citas

 «qué.

Palabra tónica, que debe escribirse con tilde a diferencia del pronombre relativo o de la conjunción que. Pronombre interrogativo o exclamativo, que, referido siempre a cosas, introduce enunciados interrogativos o exclamativos directos, y oraciones subordinadas interrogativas o exclamativas indirectas:

¿Qué te ha pasado?

¡Qué me va usted a decir, si soy yo quien le aguanta!

Ahora entiendo por qué aceptaste acostarte con Arturo.

Puede constituir por sí solo un enunciado:

¿Sabes una cosa?

¿Qué?

En estos casos, es frecuente en el habla coloquial la anteposición del artículo el:

Germán, esto no funciona.

¿El qué? (Marsillach Ático [Esp. 1995]);

pero no es admisible en la lengua culta anteponer a este pronombre el artículo neutro lo:

*No sé, fue un instante, un relámpago; y en ese relámpago sentí de nuevo...

¿Lo qué? (Mahieu Gallina [Arg. 1980]).

En oraciones exclamativas, seguido de la preposición de y un sustantivo, sirve para ponderar la cantidad, con sentido equivalente a cuánto: «

¡Qué de risitas y de guiños tuviste que soportar!

Este pronombre puede introducir oraciones interrogativas indirectas con verbo en infinitivo y dependientes de los verbos tener y haber:

¿A qué te dedicas, Juanito? [...]

Hace seis meses que me arruiné en el campo, y no tengo qué hacer;

No había qué comer, para variar, pero teníamos dignidad.

Este uso no ha de confundirse con las perífrasis verbales haber que o tener que seguidas de infinitivo, que expresan necesidad u obligación, en las que que es conjunción átona que debe escribirse sin tilde:

No tienes que hacer nada;

A él no le gustaba la tragonería, pero había que comer.

Antepuesto a un sustantivo, y referido tanto a personas como a cosas, funciona como adjetivo interrogativo o exclamativo:

¿Qué documento necesita;

Qué mujer tan extraordinaria;

No se podía saber en qué lío estaba metida;

¡Y mire qué flores más lindas!.

También puede funcionar como adverbio interrogativo o exclamativo, normalmente en oraciones exclamativas y antepuesto a un adjetivo o a otro adverbio:

¿Qué te importa ya eso?

¡Qué guapo estás!

¡Qué bien jugaste, mamá!

Como el resto de los interrogativos, puede sustantivarse:

Un episodio en el que es necesario distinguir el qué del cómo.

Forma parte de las locuciones nominales el qué dirán (‘la opinión de la gente’):

Los príncipes no hacen nada y si hacen algo [...] es para no aburrirse y evitar el qué dirán; y un no sé qué (‘algo que no se sabe explicar’):

Los ricos tienen un no sé qué que les hace especiales.

En la lengua coloquial es frecuente su uso con verbos de peso, medida o precio, con sentido equivalente a cuánto:

¿Qué vale ese cirio?

¿Qué pesa? [...] —Trescientos kilogramos.

Con el mismo valor se usa también con la palabra años:

¿Qué años tienes? [...] —Diecisiete, alteza.

Sin embargo, no debe emplearse en el habla esmerada con el valor que corresponde a otros adverbios interrogativos como dónde, cuándo o cómo, algo no infrecuente en el habla coloquial:

*¿Qué vas, al cine? (en lugar de ¿Dónde vas, al cine?);

*¿Qué llegaste, ayer? (en lugar de ¿Cuándo llegaste, ayer?);

*¿Qué lo has hecho, con un martillo? (en lugar de ¿Cómo lo has hecho, con un martillo?).»

[RAE: Diccionario panhispánico de dudas. Madrid: Santillana, 2005, p. 546-547]

«Es regionalismo decir ¿lo qué? en lugar del simple interrogativo ¿qué?:

-¡Quiere beber Mandrágora! –gritó don Crespo estupefacto.

-¿Lo qué? –dijo la señora de Cutusso (Cortázar, Rayuela, 439).

Existe también el qué en la lengua coloquial general:

-¿No veis aquello?...

-¿Elque..., el qué..., el qué...? –preguntaron todas (Pardo Bazán, Viaje, 205).»

[Seco, Manuel: Diccionario de dudas y dificultades de la lengua española. Madrid: Espasa-Calpe, 101998, p. 375]